El invierno puede ser una temporada dura para nuestra piel. El aire frío del exterior y el aire seco y caliente del interior pueden eliminar la humedad de la piel, dejándola con sensación de tirantez, picazón e incomodidad. Muchas personas luchan por mantener la piel hidratada y saludable durante estos meses, a menudo recurriendo a cremas y lociones pesadas que no siempre pueden ser efectivas. Sin embargo, hay trucos simples que pueden ayudar a mantener su piel suave e hidratada con el mínimo esfuerzo.
Entendiendo las causas de la piel seca en invierno
La piel seca en invierno es causada principalmente por los bajos niveles de humedad tanto en interiores como en exteriores. El aire frío retiene menos humedad que el aire cálido, y cuando calientas tu casa, el aire se vuelve aún más seco. Esta falta de humedad en el aire puede provocar una mayor pérdida de agua de la piel, lo que resulta en sequedad. Además, las duchas calientes, los jabones fuertes y la exposición al viento pueden exacerbar el problema, despojando a la piel de sus aceites naturales.
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